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dimecres, 28 de març del 2007

Sis plau, ¡seny!


A ERC l’hi apareix - o l’hi fan aparèixer - una “consciencia crítica”, que els retrotrau al discurs i als plantejaments independentistes, cada cop que han encetat el camí cap a la centralitat de l’espai nacionalista, cercant ocupar l’espai que històricament l’hi ha permès a CiU assolir majories electorals.

Un cop més, amb les declaracions del proppassat cap de setmana en les que oferia a CiU la presidència de la Generalitat a canvi d’un referèndum per l’autodeterminació ERC ha sucumbit al vertigen i a la seva “mala consciencia independentista”.

Un altre cop, com en el debat estatutari, al intentar llençar-li un órdago a CiU, ha aconseguit donar-li un baló d’oxigen, dintre del espai que es disputen, transformant-se en un boomerang per a ells mateixos.

D’altre banda, Mas i els seus no han rebutjat de forma taxativa la proposta de caminar cap a la autodeterminació.

No ho han fet perquè dins de la formació existeixen una pulsió interna en part del nucli dirigent favorable aquesta opció que conviu amb l’oportunisme d’altres que, com Duran Lleida, no mantenen aquest estratègia.

En tot cas, la síntesis es molt simple, tot si val per tornar al govern, encara que es jugui amb conceptes negatives per al país. ¿Que si no explica que abjuraren del proponent, però no de la proposta, malgrat això es impossibiliti deixar clar que son una força serena i responsable, allunyada d’aventures independentistes?

Aquests es doncs, una disputa entre nacionalistes demostrar qui ho es més. I així fer-se amb la petita part de l’electorat català que l’hi agradaria esser un país independent.
Una romàntica proposta que es manté ara que el que realment creix no es la independència, sinó la interdependència entre persones i pobles. I que fins i tot en els seus models , como ara al Quebec, estant sent abandonades per la majoria dels seus ciutadans.

La resta, necessitem més seny i menys aventures o debats estèrils.

Avui, como diu el President Montilla, hi ha que desenvolupar amb rigor, intel·ligència i fermesa el Estatut i, alhora i sense dilacions , exercir les competències de l’actual autogovern per resoldre els problemes de les persones o de l’economia catalana, per fer-li front a preocupacions socials com l’accés a l’habitatge, la protecció de les persones que més ho necessiten o aconseguir la gestió descentralitzada de l’aeroport.

Si s’entesten en continuar aquesta inútil partida, allà ells.

Però la resta, sis plau, ¡seny!.

dimecres, 21 de març del 2007

¿Qué es mejor?


No saben que es mejor. Si que el Tribunal Constitucional modifique el Estatut de forma substancial o que no lo haga.
Esta es la duda “trascendental” que transmite CiU con sus cambios de posición, imbuidos como están en sus tribulaciones existenciales.
Hasta hace pocos días, Mas y los suyos y algunos de sus portavoces mediáticos, daban por perdido el partido antes de jugarlo. Sentenciaban que el Tribunal Constitucional recortaría el Estatut refrendado el 18 de Junio.
Les parecía un escenario genial, para ellos. Les permitía desempolvar viejas prácticas, el victimismo, el sucursalismo, imputar de anticatalán a toda España, identificar al PSOE con el PP, proyectar su renuncia a defenderlo – porque no están gobernando - hacia el Govern, al tiempo que coqueteaban con el “irse de España, porque no nos quieren o no nos entienden”, dándole así una alegría al cuerpo y a sus juventudes.
Ahora, parece que lo negativo es que el Tribunal no lo modifique. ¿Como debe entenderse sino que se descalifique el informe del abogado del Estado presentado el 2 de Noviembre, que avala la constitucionalidad del texto?.
No se que es peor, que intenten despistarnos o que se despisten ellos, con tanta tactiquilla.
Lo mejor para el Estatut es ponerlo en marcha sin vacilaciones, porque es legal y esta vigente.
Lo mejor es no especular, todo el día, con el sentido de la sentencia del Constitucional y sino dar argumentos políticos y jurídicos para avalar su constitucionalidad.
Lo mejor es hacer política social y económica a favor de la mayoría.
Lo mejor es negociar con firmeza y determinación su implementación.
Lo mejor es dejar sentado, desde ya, que el acatamiento de la sentencia del Tribunal Constitucional, diga lo que diga, es compatible con su gestión política y la no renuncia a los objetivos perseguidos, es decir, al reconocimiento de nuestra identidad, el incremento del autogobierno y de los recursos necesarios para ejercerlo, con responsabilidad, suficiencia y solidaridad con rel resto de España.
Eso es lo mejor.

dimecres, 14 de març del 2007

Templar y apuntar maneras


Los 100 primeros días, le han servido a este Govern de Catalunya para, como dicen los taurinos, “templar” y “apuntar maneras”, que señalan hacia donde va.
Su actuación ha venido presidida por la estabilidad y la predecibilidad, en la gestión, la atención a las necesidades de las personas y el país, en las políticas, y el rigor, la firmeza, la ambición y la lealtad institucional, en el desarrollo estatutario.
Estabilidad que no procede de la inacción sino, todo lo contrario, de su intensa actuación. Las más de 180 páginas que son necesarias para compendiarla así lo acreditan.
Pero al Govern no se le pide solo cantidad sino calidad en su actuación. Por ello, además de leyes como la de Servicios sociales, la del Derecho del acceso a la Vivienda o la de Agencia Tributaria de Catalunya, se han convocado casi 7.000 plazas de maestros, 2.750 de personal sanitario o se ha ampliado las ayudas a los barrios con mayores necesidades.
Ayer, el President Montilla presentó el Pla de Govern para estos cuatro años, con él se pretende modernizar el país, hacerlo más justo y equilibrado, mediante un gobernación transparente y eficaz y desarrollando las potenciales del nuevo Estatut. Contiene medidas concretas sobre seguridad, educación, cultura, inmigración salud, infraestructuras, I+D+i. La estabilidad interna del Govern, por la mayoría que lo apoya, la forma de trabajar y el ambicioso proyecto que defiende le permite encarar las inestabilidades que vendrán de fuera, sin el derrotismo claudicante que predica la oposición nacionalista.
En sus 100 primeros días el Govern ha templado y apuntado maneras. Mas y los suyos todavía tienen que hacerlo. Hasta ahora se les ve desorientados, no solo por no encuentran su tono, sino sobretodo porque no transmiten estabilidad interna.

dimecres, 7 de març del 2007

Aprovechar la oportunidad




El Aeropuerto del Prat es una gran oportunidad para Catalunya que no se debe desaprovechar, por eso ocupa un destacado lugar en el debate catalán.
¿Que quieren que les diga?, ¡me gusta, que esa sea la polémica!. Sobretodo viendo como se están poniendo de duras las cosas de la política española. Algunos, como CiU, consideran de forma peyorativa que ese es un debate de diputación. Pero, ciertamente, esos son los debates reales, los que afectan a problemas reales.
Claro que para los que andan perdidos y alicaídos, sin papel relevante, su mayor interés radica en cuestionarlo todo y además de forma radical.
¿Cuando se darán cuenta que el catastrofismo le resta credibilidad y les aleja de los ciudadanos? Dado que no tienen una idea tan negativa de la realidad.
Afortunadamente, ahora no se debate sobre la necesidad o el tipo de infraestructura aeroportuaria. Desde hace más de tres años las obras se están ejecutando, la tercera pista ya se utiliza y, finalmente, la nueva Terminal Sur se perfila en el horizonte.
Sobe la mesa lo que está es para que servirá y como se gestionará.
En el proyecto de aeropuerto que defiende firmemente el President Montilla, el Prat recibirá vuelos intercontinentales, será un nudo de conexiones internacionales y al tiempo que doblará el tráfico de pasajeros potenciará las de mercancías.
Esa idea requiere comprometer a Zapatero y una gestión próxima, eficaz e imbricada con los intereses y necesidades de Catalunya, donde el sector público y privado catalán participen en su definición y ejecución.
Aprovechar las oportunidades requiere de un proyecto, determinación, trabajo y consenso, como plantea el Govern, y resulta estéril obsesionarse con una compañía aérea o practicar el derrotismo, como hace la oposición. Aprovechemos la oportunidad.