Mañana se reúnen el President Montilla con Mas.
Con él inicia la ronda que dará cumplimiento a su oferta de “mano tendida” a la oposición. La que realizó durante el debate de investidura, para abordar y, en su caso, acordar las políticas necesarias, sobre los temas que mas preocupan a las personas, lo que se ha venido a llamar la agenda del país.
Lo más relevante quizás sea que, en este momento, no hay un acuerdo sobre cual es esa agenda real del país.
Mientras el President Montilla ha propuesto que la reunión se centre en temas de calado social y económico, como la vivienda, la inmigración y la investigación y el desarrollo, los portavoces de CiU han declarado que su principal preocupación es asegurarse su participación en las comisiones mixtas entre los gobiernos de Catalunya y España.
Dicho sea de paso, eso que ahora piden, nunca lo habían permitido cuando mandaban. La oposición solo participaba en las comisiones de transferencias y sus valoraciones, pero nunca en las comisiones mixtas, que son entre gobiernos.
No es casual que Montilla y Mas tenga una agenda del país diferente. Es el reflejo de prioridades y sensibilidades distintas sobre las preocupaciones reales de la gente. Uno, Montilla, busca acordar soluciones a problemas reales, el otro prioriza resolver “lo suyo o lo de los suyos”.
Si el diálogo se centra en los intereses de las fuerzas políticas y no en lo que afecta al día a día de las personas, estas se alejaran de la política.
La agenda de este país no se agota con los temas propuestos, pero nadie discutirá que resulta imprescindible debatir estos. Si la oposición, propusiera otras prioridades seria lógico, positivo y constructivo, pero si se entesta en hablar solo de “su tema”, demostrara que solo se preocupa por una parte del país, no todo.
Con él inicia la ronda que dará cumplimiento a su oferta de “mano tendida” a la oposición. La que realizó durante el debate de investidura, para abordar y, en su caso, acordar las políticas necesarias, sobre los temas que mas preocupan a las personas, lo que se ha venido a llamar la agenda del país.
Lo más relevante quizás sea que, en este momento, no hay un acuerdo sobre cual es esa agenda real del país.
Mientras el President Montilla ha propuesto que la reunión se centre en temas de calado social y económico, como la vivienda, la inmigración y la investigación y el desarrollo, los portavoces de CiU han declarado que su principal preocupación es asegurarse su participación en las comisiones mixtas entre los gobiernos de Catalunya y España.
Dicho sea de paso, eso que ahora piden, nunca lo habían permitido cuando mandaban. La oposición solo participaba en las comisiones de transferencias y sus valoraciones, pero nunca en las comisiones mixtas, que son entre gobiernos.
No es casual que Montilla y Mas tenga una agenda del país diferente. Es el reflejo de prioridades y sensibilidades distintas sobre las preocupaciones reales de la gente. Uno, Montilla, busca acordar soluciones a problemas reales, el otro prioriza resolver “lo suyo o lo de los suyos”.
Si el diálogo se centra en los intereses de las fuerzas políticas y no en lo que afecta al día a día de las personas, estas se alejaran de la política.
La agenda de este país no se agota con los temas propuestos, pero nadie discutirá que resulta imprescindible debatir estos. Si la oposición, propusiera otras prioridades seria lógico, positivo y constructivo, pero si se entesta en hablar solo de “su tema”, demostrara que solo se preocupa por una parte del país, no todo.
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